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El crimen con un caramelo envenenado que hace que muchos padres teman a Halloween

Timothy O'Bryan, de 8 años, murió a causa de un caramelo envenenado el 31 de octubre de 1974. Pero no fue asesinado por un desconocido.

En millones de padres en Estados Unidos el temor a que sus hijos recojan caramelos envenenados está latente cada Halloween. Si eres uno de ellos, seguramente inspeccionas el dulce botín antes de permitir que lo devoren.

Pero, ¿cuál es el origen de esa paranoia? ¿Realmente se han producido muchos casos de caramelos envenenados o contaminados durante la popular fiesta estadounidense?

Te asombrará conocer que en realidad sólo existe un caso conocido de asesinato con dulces envenenados durante Halloween.

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Ocurrió en 1974. En su casa, Timothy O'Bryan abrió un "pixy stick" que recibió mientras hacía su ronda de trick-or-treat (“dulce o travesura”) y de inmediato se quejó de que "sabía amargo". Su padre le dijo que se lavara el sabor con un refresco Kool-Aid, pero el niño empezó a vomitar, así que el hombre llamó a una ambulancia.

Timothy llegó muerto al hospital. Había sido envenenado con el pixy stick, que contenía suficiente cianuro como para matar a dos personas.


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Lo que pocas personas saben hoy es que el asesino había sido su propio padre.

Las autoridades pronto determinaron que Ronald Clark O'Bryan tenía motivos: agobiado por deudas, había sacado varios seguros de vida a nombre de su hijo. Y además había comentado con sus compañeros de trabajo sobre el poder del cianuro y cuánto demoraría en matar a alguien.

Después del crimen, no sólo en el barrio de O’Bryan en Texas, sino en muchas partes del país se extendió una especie de paranoia. Los padres prohibieron a los niños salir a recoger caramelos, y se cancelaron muchas celebraciones de Halloween.

Pero la realidad, dicen los sociólogos, es que la idea de que desconocidos pueden envenenar a niños durante Halloween es más leyenda que realidad.

Ronald Clark O'Bryan, quien luego fue conocido como “Candy Man” u “Hombre caramelo”, fue ejecutado en 1984.


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