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En protesta masiva, boricuas exigen la renuncia del gobernador Rosselló

Miles de boricuas salieron a las calles de San Juan para mostrar su descontento con el gobernador Rosselló y exigir su renuncia

Miles de personas exigieron en una manifestación histórica la renuncia del gobernador de Puerto Rico, Ricardo Rosselló, por su participación en un chat de miembros del Ejecutivo en el que se traman ataques, se insulta y burlan de figuras públicas de la isla, incluidos compañeros.

Una multitudinaria marcha celebrada este miércoles en el Viejo San Juan, el casco histórico de la capital puertorriqueña, fue el punto culminante a cuatro jornadas de protestas para pedir la salida de Rosselló, aislado y con menos apoyo cada día que pasa después de que el sábado se revelaran las casi 900 páginas de un chat de la aplicación de mensajería Telegram.

Rosselló y sus círculo de colaboradores más directos arremeten con lenguaje soez contra oposición, compañeros de partido, funcionarios y artistas, incluido el cantante puertorriqueño Ricky Martin, uno de los participantes en la manifestación de hoy, que hasta el momento, a pesar de la tensa calma de algunos momentos, no ha registrado incidentes.

La marcha fue un éxito de participación, una iniciativa que ha contado con el apoyo de figuras del mundo artístico como el propio Ricky Martin, Bad Bunny, Residente y Tommy Torres, así como el actor Benicio del Toro.

La manifestación partió del Capitolio, sede del Legislativo, donde miles de personas escucharon las palabras de los artistas, que arremetieron, algunos con lenguaje vulgar, contra Rosselló, que a pesar de la pérdida de apoyos que sufre cada día ha dicho que seguirá en el cargo, aunque ha pedido perdón por todo lo ocurrido.

Bad Bunny y Residente fueron los más agresivos, mientras que Martin y Del Toro se mostraron más comedidos, aunque lamentaron la situación que atraviesa la isla caribeña derivada de la crisis institucional que siguió a la publicación el sábado de las casi 900 páginas del chat.

Los artistas se dirigieron hacia el Viejo San Juan para seguir los actos de protesta a las puertas de La Fortaleza, la sede del Ejecutivo y residencia oficial del gobernador.

Las calles del casco histórico de la isla se han convertido en una auténtica marea humana de miles de personas que hace imposible moverse en varias áreas de la zona, en especial en las calles que circundan a La Fortaleza.

La situación es, de momento, de calma, tal y como habían solicitado los artistas, aunque existe temor de que puedan repetirse los incidentes de la noche del lunes, cuando la Policía lanzó gases lacrimógenos para dispersas a los manifestantes.

Policía y manifestantes se acusaron de iniciar los incidentes que provocaron el incendio de contenedores, carreras, desperfectos de mobiliario urbano, detenidos y agentes heridos.

La Policía cuenta con un fuerte dispositivo desplegado y controla con helicópteros sobrevolando el área la situación, que en algunos momentos recordaba a la de las fiestas patronales de la capital en enero, por el carácter, casi festivo, que en ocasiones tomó la protesta, en la que algunos manifestantes aprovecharon para entrar a los bares abiertos para sofocar su sed con cerveza.

Las calles del Viejo San Juan permanecen todavía invadidas por miles de personas, la mayoría jóvenes, que no paran de pedir la dimisión de Rosselló.

"Dónde está Ricky, Ricky no está aquí, Ricky está robando lo que queda del país", fue el cántico estrella de esta tarde en San Juan, donde pancartas y gritos han hecho que la de hoy sea una jornada histórica para Puerto Rico.

Los gritos de los miles de puertorriqueños que este miércoles se manifestaron en San Juan no han servido, de momento, para que Rosselló dimita de su cargo.

El jefe del Ejecutivo se aferra al cargo tras haber pedido perdón y aunque reconoce su error ha dicho que se va a mantener en el cargo e, incluso, no ha descartado presentarse a las reelecciones.

Rosselló trata así de enfriar el ambiente y tanto él como su equipo más cercano repiten la idea de que los ciudadanos deben de juzgar, al margen del famoso chat, el desempeño del Ejecutivo, para ellos el mejor en décadas, como dicen corroborado por unos índices económicos sin precedentes.

La crisis y los incidentes que la acompañan provocaron hoy que por segundo día consecutivo un crucero no atracará en el puerto de San Juan por razones de seguridad, debido a la celebración de la manifestación.

Además del chat, la crisis institucional se agudiza por la detención de seis personas, entre ellas la exsecretaria de Educación Julia Keleher, acusadas por fraude, en lo que es un nuevo caso de corrupción gubernamental en la isla.

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